“Fita” Piotti es la directora de esta obra que reúne a una docena de mujeres que se conocieron hace cuatro décadas en la Escuela Nacional de Danza. “En la pandemia una ex profesora nuestra Norma Stefany nos empezó a llamar por teléfono y nos empezamos a conectar, tomamos una clase con ella y nos volvimos a juntar, empezamos a tomar clases juntas y ahí surgió esta idea de hacer un espectáculo”, explica.
¿Cómo es un reencuentro después de cuatro décadas? ¿Qué nos
une a personas que no vemos hace décadas?, esas preguntas son las que intenta
responder María Fabiana Piotti, “Fita”,
directora de la obra “A tiempo”, de la compañía “Las Filias”, que cuenta la historia la historia de un grupo
de mujeres mayores de cincuenta años, que deciden recordar y retomar la
experiencia que comenzó cuándo se formaron en la escuela de danza.
“Somos doce mujeres
que nos recibimos casi todas en la Escuela Nacional de Danza en el año 82, cuando
teníamos 18 años, y nos conocemos prácticamente desde los 8 que entramos a la
escuela de danza. Cursamos diez años la carrera en la escuela de danza, y
después cuándo terminamos cada una siguió su ruta, algunas siguieron bailando,
otras no, algunas siguieron como profesoras en la escuela, pasó el tiempo, y en
la pandemia una ex profesora nuestra Norma Stefany nos empezó a llamar por
teléfono y nos empezamos a conectar, tomamos una clase con ella y nos volvimos
a juntar, empezamos a tomar clases juntas y ahí surgió esta idea de hacer un espectáculo,
ahora, ya grandes”, explica “Fita”.
Además, en esta charla con “La puerta de atrás”, la
directora de “A tiempo” entiende que el teatro es un acto de fe, y explica: “El teatro es una comunión, como la iglesia,
vos vas a un lugar, el espectador sabe que hay alguien que le va a contar una
historia, que va a actuar un personaje y decide creérselo, acepta esa creencia,
y pasa como a un tiempo fuera del tiempo. Vos entras a ver una obra de teatro,
que es distinto del cine, porque tenes a la gente ahí, le podes ver la gota de
transpiración, le sentís la respiración, es una convención del espectador con
el actor o el bailarín, vas ahí lo disfrutas y aceptas creerle lo que te va a
contar y eso yo creo que es una acto de fe”.
P-¿Cree que ese
conocimiento previo, más allá del intervalo en el que no estuvieron en
contacto, influyó en la preparación de la obra?
R-Si, un montón.
Nosotras durante diez años tuvimos una convivencia muy intensa, de los 8 a los
18 conoces el mundo y nosotras lo conocimos juntas, y eso nos da también
una cierta confianza entre nosotras y un conocimiento, primero del cuerpo, que
es muy de bailarín, yo reconozco a mis compañeras, las puedo reconocer por los
pies. Hay un conocimiento muy intenso.
Nos veíamos casi todos los días durante diez años. Y después hay una cosa
que uno se conoce con los otros porque crecimos juntas. La escuela de danza
quedaba en el centro y todas éramos muy dispares, de distintos barrios, de la Ciudad
o de la Provincia, y eso también traía algo de un grupo muy heterogéneo, muy
diferentes, y a la vez aprendimos de
nuestras diferencias y eso nos nutre un montón, antes y ahora. Nosotras no
tenemos tanta diferencia de edad, pero hemos crecido de distintas formas en
estos últimos años de nuestras vidas, es como un espiral cómo que estamos en un
mismo lugar, pero en otro lugar. La obra
tiene mucho de lo que hicimos, contamos parte de experiencia nuestra en la
escuela de danza, contamos un poco cómo era la formación en esa época, que
tiene mucho humor porque nos reímos de nosotras, de lo que hicimos.
P-¿Cuánto hace qué
están ensayando y preparando la obra?
R-Hace un montón, empezamos en 2022, nos pusimos más serias
con la obra, pero cómo todas tenemos una vida, trabajos, hijos, nos juntamos
una vez por semana, los sábados a la tarde, y por ahí no vamos tan rápido. Hicimos muchos Zooms para sacar ideas y ver
que hacemos, que no hacemos, que ponemos, música.
P-¿Por qué decidió
llamarla “A tiempo”?
R-Todo es una creación colectiva, yo hago la dirección pero dentro de la creación colectiva, mi dirección es un poco para poder organizarnos. El teatro, cómo un montón de rubros, es bastante piramidal, necesita tener cómo una cabeza a la que pueda remitir todo el mundo, pero todas las decisiones están tomadas grupalmente. Las que conformamos el grupo inicialmente éramos seis, y después fuimos convocando otras bailarinas que algunas cursaron con nosotras, otras por ahí no, pero si cursaron en la escuela. Fundamentalmente somos seis, que somos las que hacemos la producción también y estamos atrás de la idea. Y la idea del nombre “A tiempo”, es llegamos a tiempo, este es nuestro tiempo. Tiene que ver también con la cosa musical, el baile, que tenes que ir a tiempo, es un poco ese juego de palabras, a tiempo del baile y a nuestro tiempo, a este tiempo. También tiene un poco que ver con que los bailarines son gente joven generalmente, la carrera de un bailarín profesional a los 30 años empieza a tomar otro rumbo, porque ya tenes otro cuerpo y nosotros somos todas más o menos de 50 años para arriba y por eso también el tema de “a tiempo”, a nuestro tiempo, al tiempo al que estamos ahora.
P-¿Qué expectativas tienen para el debut, el 5 de Mayo?
R-Vamos a estar todos
los domingos de Mayo en el “Teatro Cendas” en Palermo, a las 18. Nuestras expectativas son muy altas
(risas). Nosotras básicamente queremos
pasarla bien, que la gente que venga a ver la obra la disfrute, poder
transmitir un poco de alegría. En la obra bailamos, sacamos a la gente a
bailar, son todos temas conocidos, es para bailar y salir con una sonrisa y con
ganas de hacer, saber que aunque tengas más de 50, que pienses que la vida te
pasó por arriba, te podes subir a un escenario, bailar, reírte. Nuestra
expectativa es esa, que venga la gente a vernos, que le guste, que la puedan
disfrutar.
P-¿Cómo ve la
actualidad del teatro?
R- Es muy raro lo que
pasa, en este país el teatro es un refugio y hay un montón de teatro. Siempre
para los actores, los bailarines, el teatro es un gran refugio, sobre todo
cuando hay crisis y hay menos producciones que pongan mucha plata. El teatro
tiene una dimensión más humana. Yo puedo manejar los gastos, puedo hacer
una obra y no necesito de tanta infraestructura . El teatro siempre sobrevive a un montón de cosas, y creo que en este
momento de tanta crisis hay un montón de obras de teatro, pequeños
escenarios donde la gente muestra una cosa, la otra, eso también tiene que ver
con la crisis, porque la crisis empuja también a que la gente
pueda hacer esas cosas me parece, no hay tantas producciones que te
contraten entonces la gente toma la iniciativa. Y el teatro es absolutamente
agradecido, te deja tomar la iniciativa y vos podes desarrollarlo, no necesitas
mucha infraestructura, si mucho empuje, mucha perseverancia, pero después podes
salir adelante.
P-¿Qué significa para
usted el teatro?
R-Una comunión, como la iglesia, vos vas a un lugar, el espectador sabe que hay alguien que le va a contar una historia, que va a actuar un personaje y decide creérselo, acepta esa creencia, y pasa como a un tiempo fuera del tiempo. Vos entras a ver una obra de teatro, que es distinto del cine, porque tenes a la gente ahí, le podes ver la gota de transpiración, le sentís la respiración, es una convención del espectador con el actor o el bailarín, vas ahí lo disfrutas y aceptas creerle lo que te va a contar y eso yo creo que es una acto de fe.
P-¿Por qué la gente debería ver la obra?
R-La deberían ver primero para divertirse, para cambiar la
energía, es una obra que te cambia la
energía, cuando salís, salís siendo otra persona de verdad, porque toca algunas
fibras que conmueven y a la vez te hace disfrutar y reir, y te hace olvidar un
poco el momento presente, y me parece que está bueno que la gente vaya a
verla, porque es una experiencia, el teatro es una experiencia. Hoy por hoy estamos en un mundo dónde estás
vos solo con lo que vos ves, una película solo en tu casa, una serie en tu
computadora, acá estás con un montón de gente y estás inmerso en una situación
y eso te cambia, radicalmente te cambia la energía, la gente debería venir
a verla y disfrutarla, y me gustaría que
nos conocieran y que vieran este grupo de doce mujeres, que atraviesan todos
los dolores físicos para estar ahí, somos doce particularidades que son
interesantes también.
P-¿Cómo fueron sus
inicios en el teatro?
R-No quiero personalizar tanto, porque creo que esto es de
todas, pero yo salí de la escuela de danzas cómo todas y mi ilusión en ese
momento era ser bailarina, no había grandes lugares, si bien estaba el Teatro
Colón y el San Martín, no había tantos lugares para exponerse como bailarina,
había algunos teatros, y después empezó a surgir la comedia musical y yo entre
al teatro por la comedia musical, en ese momento te presentabas a prueba, entre
al teatro por ahí, y es fascinante todo lo que rodea a la mística del teatro.
Las comedias musicales de ese entonces no son como las de ahora que tienen
mucha producción, y que muchas son historias de afuera, yo estaba en las
comedias musicales que se hacían acá.
El grupo de trabajo de “A tiempo” está compuesto por:
Creación
colectiva: Mónica Aubín, Liliana Lorenzani, Laura Peña, Fabiana Piotti, Silvina
Riopa, Mariana Topatigh. Dirección:
Fabiana Piotti
Bailarinas: Mónica Aubín, Patricia Hermida, Viviana Loingburd, Liliana Lorenzani, Laura Peña, Marcela Percivale, Fabiana Piotti, Silvina Riopa, Marcela Ríos, Patricia Ríos, Paula Sánchez, Mariana Topatigh
Coreógrafas: Fabiana Piotti, Silvina Riopa, Mariana Topatigh.
Asistente de coreografía: Mariana Topatigh
Producción general: Mónica Aubín, Liliana Lorenzani, Laura Peña, Fabiana Piotti, Silvina Riopa, Mariana Topatigh
Pueden ver “A Tiempo” todos los domingos de Mayo, a las 18, en Auditorio Cendas, en Bulnes 1350, CABA.
Mauro Castro
LPDA- 28-4-24
Hermosas Las Filias, contagian su entusiasmo y sus ganas.
ResponderEliminar¡También se notó en la entrevista ! 🙌🏻🙌🏻
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